- El INE confirma que el decrecimiento fue tres décimas menor al tramo final de 2012
- El ajuste del gasto público vuelve a acelerarse en el primer trimestre del año
- Frena el descenso del consumo privado, pero España encadena su séptimo trimestre en recesión
Alejandro Bolaños Madrid (Publicado en El País, aquí)
La enorme debilidad de la demanda interna sigue lastrando la evolución de la
economía española, que enlaza ya siete trimestres en retroceso, apenas cuatro
años después de que la Gran Recesión dejara de destruir valor añadido. El
Instituto Nacional de Estadística ha confirmado este jueves que, entre enero y
marzo, el PIB se dejó un 0,5% respecto al tramo final de 2012. En la
comparación anual, la caída es del 2%, tal y como había adelantado el INE hace
un mes.
El descenso trimestral del PIB se atenúa si se compara con lo que ocurrió en
el cuarto trimestre de 2012, cuando bajó un 0,8%. Pero aun así sigue siendo muy
intenso: desde 2008, cuando arrancó la Gran Recesión, solo otros cinco
trimestres han deparado resultados peores.
La ralentización de la caída del PIB es paralelo al frenazo en el descenso
del consumo de las familias, que retrocede un 0,4% en tasa trimestral, lejos del
desplome (-1,9% en tasa trimestral) de los meses finales de 2012. Pero en buena
parte se debe a que la comparación se hace con un periodo extraordinario,
marcado por la supresión de la paga de los funcionarios y por la falta de
compras de bienes duraderos, adelantadas al verano para sortear la subida del
IVA en septiembre. En suma, el gasto de los hogares vuelve a bajar, pese a que
se compara con uno de los peores trimestres de la crisis para el consumo
privado.
Además, en la mala evolución de la demanda interna (en términos anuales, el
retroceso, -4,7% apenas es menos intenso que el -4,9% de finales de 2012) vuelve
a pesar el ajuste del gasto público, que se reactiva en el arranque de 2013
(-1,2% en tasa trimestral), cuando en el tramo final de 2012 se había suavizado
(-0,3%).
El ajuste público se deja sentir también en la inversión, con otro descenso
significativo (2,5% en tasa trimestral) en el área de construcción por la
escasez de obras públicas. Una de las pocas notas positivas que refleja la
contabilidad nacional de este trimestre es la mejora de la inversión en bienes
de equipo, influida por la recuperación de las exportaciones de mercancías, que
pasa de retroceder un 5,4% en el trimestre final de 2012 a lograr un mínimo
avance (0,2%) entre enero y marzo.
La mejora de la exportaciones de mercancías permitió transformar el retroceso
de los meses finales de 2012 (-1,8%) en crecimiento (1,2%) en el arranque de
2013. Una evolución positiva que se plasmó en marzo en el primer superávit
comercial de la economía española en décadas. Pero no logró revertir el descenso
en las ventas al exterior, ante el mal resultado de las exportaciones de
servicios, que bajaron un 6,6%.
En conjunto, las exportaciones intensifican el ritmo de caída, del -0,9% al
-1,3%, y enlazan, por primera vez desde el desplome del comercio internacional
en 2009, dos trimestres en negativo. Solo el descenso de las compras al exterior
(-1,7%), permite mantener la aportación positiva del sector exterior al
crecimiento del PIB.
La contabilidad nacional confirma lo que ya adelantó la Encuesta de Población
Activa, que la destrucción de empleo volvió a ser muy intensa en el primer
trimestre. Respecto al mismo periodo de 2012, hay un 4,5% menos de ocupados, un
retroceso muy similar al de los últimos cuatro trimestres. También continúa a
buen ritmo la moderación salarial. Solo el aumento de excedentes empresariales y
de los impuestos a la producción presiona ligeramente al alza los
precios.