Redacción upyd.es (Ver aquí)
Ni la fiscalía ni el Gobierno. Unión Progreso y Democracia presentó en julio de 2012 la querella contra Rodrigo Rato y otros consejeros de Bankia que les ha llevado al borde de la condena. La querella de UPyD denunciaba que Bankia había salido a bolsa con unas cuentas falsas, por lo que estábamos ante un grave caso de estafa y otros cuatro delitos. Después, el caso se fue complicando y salieron escándalos como los de las tarjetas black o los apaños de Rato con la empresa Lazard. El hombre que pudo presidir España está ahora contra las cuerdas, después de que el informe de los peritos independientes -la principal prueba de las que pidió UPyD- haya confirmado los hechos denunciados.
El informe pericial es demoledor. Concluye que las cuentas de Bankia y su matriz BFA estaban muy lejos de representar la imagen fiel de ambas compañías. "La fijación del precio de la salida a bolsa no fue un modelo de concurrencia pues se realizó en base a las ofertas de 29 grupos económicos, algunos incluso con relaciones de dependencia respecto al grupo BFA", afirman los peritos del Banco de España, que además son muy duros con la gestión de la entidad. Extienden la responsabilidad hasta el equipo que sucedió a Rato, afirmando que tampoco las cuentas reformuladas por José Antonio Goirigolzarri, actual presidente de Bankia, reflejan la situación real de la compañía.
UPyD ha impulsado el caso en medio de ataques, insultos y obstáculos. Ha gastado más de 100.000 euros. Y nada lo ha detenido
El País
Bankia salió a Bolsa con unas cuentas maquilladas, según el Banco de España
Los dos peritos del Banco de España a los que el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu encargó analizar las irregularidades en las cuentas y la salida a Bolsa de Bankia han remitido al juzgado un informe demoledor. En el documento, realizado por los expertos del supervisor, se concluye que las cuentas con que Bankia salió a Bolsa y se incluyeron en el folleto de emisión de la oferta pública no reflejaban la imagen fiel del banco que entonces presidía Rodrigo Rato. Además, se acusa al auditor de haber fallado al haber dado por buenas esas cifras en base a las cuales invirtieron cientos de miles de pequeños inversores. Estos perdieron casi todo el dinero invertido si conservaron sus acciones hasta la nacionalización de la entidad…