La democracia es el sistema político de las personas libres. Sus leyes e instituciones tienen como objetivo que la gente sea dueña de su vida. Que puedan decidir cómo vivirla en todos sus ámbitos: el político, el laboral, el afectivo, el social… En democracia, nadie debería obligar a nadie a hacer lo que no quiere. Y las decisiones libres no deberían ser actos de heroísmo. Nadie debería jugarse la vida por elegir una papeleta electoral, por su orientación sexual, por afiliarse a una asociación. Todo debería ser más sencillo. Lo cual no quiere decir que la libertad salga gratis. Tiene otra cara: la de la responsabilidad.
Un ciudadano cabal no es un niño. No puede limitarse a exigirlo todo y renegar de las consecuencias de sus actos
Los españoles que han donado más de 100.000 euros a UPyD son la avanzadilla de los que el día 24 darán la gran sorpresa de las elecciones
Se trata de rechazar los mensajes facilones de quienes dan por amortizado a UPyD. Se trata de nadar contra la corriente. Se trata de luchar. Votar a UPyD no es un acto heroico, pero sí un acto de libertad. Al hacerlo se lanza un mensaje subversivo: "no me voy a dejar influir por el ruido, atenderé a los hechos". Cientos de españoles ya lo están haciendo. Gracias a sus donativos, UPyD cuenta ahora con 100.000 euros más para hacer su campaña electoral. Son la avanzadilla de los ciudadanos que el día 24 darán la gran sorpresa de las elecciones. Los que demostrarán que en España hay mucha gente libre que asume su resopnsabilidad. Gente que votará a UPyD.