Alguien pudiera pensar que en España, tenemos dos gobiernos distintos; alguien, seguramente, podría llegar a la conclusión de que, el Ejecutivo del señor Rodríguez Zapatero, es un ente ambiguo, desconcertante y de pensamiento polimórfico de modo que un día se expresa en un determinado sentido respecto a un tema y, al siguiente día, dice todo lo contrario. Esta facultad, por raro que pueda parecerle al común de los mortales, tiene la virtud de dar la sensación de que nuestros dirigentes, el Gobierno del señor ZP, no se equivocan nunca, porque es evidente que si uno dice blanco un día y negro al siguiente nunca se equivoca porque, seguramente, una de las dos cosas será cierta. Lo que ocurre es que, la simpleza del procedimiento, su propia incoherencia y el abusar del mismo recurso, puede llegar a producir cansancio en aquellos con los que se practica y, aún más, cuando el truco se repite con tanta frecuencia que hasta los más crédulos caen en la cuenta de que se los están pasando por los fondillos de los pantalones.
Que ZP está en la UVI de los políticos, ya nadie lo pone en duda; que la irrupción de nuestro Presidente como el encargado de presidir la UE, durante este semestre, lejos de conseguir realzar a España, sacarla del marasmo en el que está metida y reforzar su imagen en los foros internacionales, ha sido y está siendo un duro Vía Crucis, donde cada caída, cada tropezón y cara perogrullada de ZP, es valorada milimétricamente por los observadores europeos, puesta en cuestión por Bruselas y zarandeada por toda la prensa europea y americana. Creo que está fuera de discusión que, la imagen de una España mal dirigida en lo económico, peor orientada en lo financiero y lamentablemente encaminada en lo social, hoy en día, es una lastimosa realidad que está en boca de todas las cancillerías europeas y de allende el Atlántico. Es por eso que clama al cielo el que, la plana mayor del socialismo hispano, dirigida por sus rutilantes estrellas: Leire Patín, Pepiño Blanco, la vice de la Vogue y la nueva ministra de Economía, señora Salgado; se hayan empeñado en desmentir a todo quisquae, intentando sacarse las culpas de encima y acusando a todos los que se atreven a criticarnos de promover una especie de contubernio judeo–masónico, ¿les suena esta frase?, con el único objeto que “desprestigiar a España” y atacar al “euro”.
Si las argumentaciones de estos señores no fueran tan pueriles; si su negligencia e incapacidad para enfrentarse a la recesión no resultaran tan patentes y palmarias; si sus contradicciones, a lo largo de los casi tres años que llevamos de crisis, no estuvieran documentadas en todas las hemerotecas del país y, finalmente, si ha sido su empeño en imponer su criterio, su desprecio hacia los argumentos de la oposición y su temeridad al imponer unas medidas ineficaces, insuficientes y meramente lenitivas, para atajar el mal que nos afecta; lo que nos ha conducido –a pesar de las advertencias que desde el FMI, el BCE, Bruselas y el propio Banco de España se nos han hecho – a ser la nación de Europa que, junto a Grecia, Letonia, Irlanda y Portugal, tenemos el dudoso honor de llevar el farolillo rojo, con pocas esperanzas de superar la crisis; cuando, en las otras naciones de la UE, ya están comenzando a salir de ella. No podemos, pues, entender como, el señor Blanco, en el colmo de la desvergüenza, hable de conspiraciones internacionales contra el “euro” basadas en supuestas tramas especulativas. Sin embargo, no es necesario que acudan a salvavidas tan retorcidos para explicar lo que está ocurriendo en Europa con el “euro”; porque tiene una explicación mucho más simple y menos enrevesada que la que pretenden buscar los del PSOE para “escurrir el bulto” y traspasarle el muerto a los demás, entre los que se encuentran, como no podía fallar, los del PP que, a pesar de haber estado criticando desde el principio la errónea política de ayudas del Gobierno ahora, los que se negaron a hacerles caso, pretenden acusarles de no “haber arrimado el hombro”. ¡El hombro se arrima para algo que tiene opciones a dar resultado no para apoyar medidas destinadas al más rotundo fracaso! La incapacidad e intransigencia del Gobierno de ZP a admitir enmiendas, propuestas, consejos y ofrecimientos de ayuda para enderezar el rumbo del país han sido, sin duda alguna, la causa de que nos encontremos en la situación en la que estamos.
La causa de la preocupación que hoy existe en toda Europa no se la achaquemos a los demás y admitámoslo somos nosotros, España, acompañados de Grecia Irlanda y Portugal que no han sabido hacer los deberes que se nos recomendaron y que, al menos en el caso de ZP, no sólo rechazó las recomendaciones que se nos hacían sino que incluso se burlo de aquellos que nos las hacían, presumiendo de que España era la más sólida financieramente, la que tenía mejor economía y la que mantenía la renta per capita más alta ¡qué caro estamos pagando aquellos faroles de ZP en Washington! Vamos a ver si dejamos claras algunas cosas: ¿si en Davos se nos cantaron las cuarenta por qué, el señor ZP, en lugar de prometer un plan de ahorro bien estudiado, para presentarlo en unos días, volvió a improvisar comprometiéndose a algo cuyas consecuencias no sabía prever? ¿O es que, ZP, pensaba que, con una rectificación dentro de las 48 horas siguientes, en la que se desdecía de lo dicho y afirmaba que aquella oferta no era más que un ejemplo; en Bruselas se iban a quedar convencidos y tan contentos. Si no fuera un ignorante integral en materia financiera, debiera haber sabido que cosas como estas, de una simplicidad tal, bastan para crear, como sucedió, la mayor desconfianza hacia un país, lo que produjo el desplome de las bolsas con caídas aproximadas al 6%.
Lo mismo ocurrió con la propuesta de elevar a 25 los años necesarios para calcular las bases de las pensiones, elevando en diez años los 15 actuales. No. señor Blanco no busque fantasmas fuera de España, el problema lo tiene usted aquí mismo, cuando doblamos el número de parados de otros países y vamos aumentando nuestro endeudamiento a una velocidad desmesurada, mientras que el desempleo sigue creciendo y las empresas siguen cayendo, una detrás de otra, de modo que, en el 2009, la industria española ha sido la que ha tenido el mayor desplome de todas las economías desarrolladas. Un dato significativo: el número de persona y empresas que se declararon en concurso de acreedores durante el año 2009 fue de 5.922 un 79% superior al del ejercicio anterior. Lo que les ocurre a nuestro gobernantes es que saben que se verán precisados a colocar 225.000 millones de deuda durante el 2010 y, con el pánico, suscitado entre los inversionistas exteriores, causado por sus propios errores, va a ser bastante difícil que el Tesoro alcance sus objetivos, a no ser que se la queramos endosar, como parece ser, a China ¿cuál será la sobreprima que esta operación nos va a costar? Si, señora Salgado, estas son las consecuencias de ir bromeando con temas tan serios y estos serán los frutos que su gobierno desprestigiado, presidido por un ZP en sus horas más bajas de toda la legislatura, va a tener que soportar un país que se merece estar entre los más grandes, pero que, en sus manos, se está hundiendo en el lodazal de su sectarismo izquierdista y su incompetencia para seguir el ejemplo de otros países que, como Francia y Alemania, con todos los problemas que se quiera, pero que van en camino de superar la crisis, con varios años de adelanto a las fechas que se nos atribuyen a nosotros. La única conjura, señores socialistas, será sin duda “La conjura de los necios” cuyo protagonismo les corresponde, íntegramente, a ustedes, los del PSOE.
Miguel Massanet Bosch