CUMBRE DEL BANCO MUNDIAL Y EL FMI »
- El FMI mantiene que el PIB crecerá un 3,1% este año y mejora la previsión de la tasa de paro
- El frenazo de los emergentes enfría el crecimiento mundial
- In English: Spain managing to hold off impact of global slowdown: IMF report

El ministro de Economía español, Luis de Guindos, tras la reunión del Ecofin de este martes en Bruselas. / JULIEN WARNAND (EFE)
En la economía española pesan más las ventajas del nuevo escenario internacional (petróleo más barato, euro depreciado frente al dólar, intereses bajos) que las desventajas (menos exportaciones a Chinas, menos demanda desde América Latina). O eso debe pensar el Fondo Monetario Internacional, que exime a la España de las revisiones a la baja que proliferan en su último informe económico, presentado este martes en Lima (Perú), donde el FMI celebra esta semana su asamblea anual.
El FMI, que vuelve a destacar que el crecimiento de la economía española es “especialmente intenso” en comparación con el de la zona euro, se agarra a la previsión que ya hizo en julio, cuando anticipó que el PIB español avanzaría un 3,1% este año y un 2,5% el próximo. Es un vaticinio algo menos optimista que el del Ejecutivo de Rajoy, que espera un crecimiento del 3,3% en 2015, pero suficiente para colocar a España a la cabeza del crecimiento entre los países avanzados.
Entre los países europeos avanzados, solo Irlanda(4,8%), Luxemburgo (4,4%), Chequia (4,8%) y Eslovaquia (3,2%) registran tasas de crecimiento superiores en la previsión del FMI para 2015. De media, el avance de la zona euro se queda a la mitad de lo que crecerá el PIB español este año.
Pero el impulso de la recuperación española no sirve aún para recuperar el nivel de actividad previo a la crisis, algo que ya han hecho la mayoría de los países de la zona euro. Y las previsiones revelan que la tasa de paro española sigue siendo la más alta, solo detrás de la de Grecia (27%).
Eso sí, el Fondo aprovecha para ajustar el mejor pronóstico económico a sus perspectivas laborales, que no cambiaba desde julio. De modo que ahora anticipa una tasa de paro promedio del 21,8% este año y del 19,9% el próximo, un pronóstico muy similar al que sostiene el Gobierno español.