- A pesar de haber iniciado la 'desconexión' de España, el Govern exige recibir el 33% del dinero del fondo autonómico que queda por repartir
- Son 2.300 millones para 'financiar servicios públicos'
- Hacienda subraya su 'estupor' por que la Generalitat reclame en la actual situación
- El Ejecutivo catalán ha recibido de los fondos de rescate 37.487 millones
CARLOS SEGOVIA Madrid (Publicado en El Mundo, aquí)
Mientras lanza el «proceso de desconexión» del Estado en el Parlament, el presidente en funciones de la Generalitat, Artur Mas, no duda en reclamar al tiempo un incremento de su conexión con el fondo económico estatal de rescate autonómico.
La Generalitat de Cataluña ha solicitado al Ministerio de Hacienda 2.300 millones de euros antes de final de año para cubrir sus necesidades de liquidez. Esta cifra equivale al 33% de los 7.000 millones que tiene la bolsa final de la legislatura, que será repartida en las próximas semanas, según han asegurado a EL MUNDO fuentes del Ministerio de Hacienda.
El Govern pide al Estado el 33% del Fondo de Rescate Autonómico CRISTINA DE ROJAS (Vídeo)
Al final de cada ejercicio, el Departamento que dirige Cristóbal Montoro procede a repartir el remanente no utilizado del llamado Fondo de Liquidez Autonómica(FLA). Fuentes de Hacienda explican que, en esta ocasión, la cifra pendiente asciende a los citados 7.000 millones, dinero que es prestado a interés cero y que se ha convertido en un pastel goloso para las escuálidas tesorerías autonómicas.
La Generalitat exige que, de ellos, se le entreguen los citados 2.300 millones -un tercio del total- que constituyen el exceso de déficit en el que incurrieron en 2014. No obstante, fuentes del Govern puntualizan que no tienen preferencia en recabar el dinero del fondo autonómico o recibirlo por «cualquier otra fórmula». El caso es obtener esa cifra para «financiar los servicios públicos».
Dedicar a Cataluña los 2.300 millones que solicita sería darle la mayor porción del pastel a repartir, como de hecho ya viene sucediendo desde que el Gobierno creó en 2012 el FLA y el mecanismo de pago a proveedores. Según datos del Banco de España, Cataluña ha recibido hasta junio de 2015 un total de 37.487 millones de ambos fondos de rescate, lo que representa el 35% de los 107.544 millones repartidos entre todas las comunidades. El segundo Gobierno autonómico más beneficiado es el valenciano, con 24.740 millones.
En el Ministerio resaltan que la Generalitat pide más dinero «porque se desvió en el objetifvo de déficit» y aseguran que «la distribución del remanente será aprobada por el Consejo de Ministros en función de las necesidades de cada comunidad autónoma y tratando a todas por igual». No obstante, subrayan su «estupor» con la iniciativa secesionista en coincidencia con las peticiones de fondos que está realizando la Generalitat.
Estas fuentes resaltan «la contradicción política» que supone iniciar un proceso de secesión y reclamar al mismo tiempo más apoyo financiero del Estado. Advierten asimismo de que Hacienda tendrá en cuenta en el reparto «la actitud de gestión de los distintos gobiernos autonómicos». El ministro de Economía, Luis de Guindos, aseguró el pasado jueves en el programa Espejo Público de Antena 3 que el Gobierno seguirá «por supuesto financiando los servicios públicos en Cataluña», que es la prioridad del FLA. Montoro también sostiene que cortar el grifo a la Generalitat llevaría a la quiebra a una comunidad clave de España, con el consiguiente perjuicio para la reputación y financiación del Estado.
¿Por qué no paga a las farmacias?
Siendo así, ¿por qué la Generalitat no paga a las farmacias? «Es su decisión, ellos priorizan el uso del dinero del FLA y así gestionan», critican en el Ministerio. «Parece que el Gobierno central quiere que revienten los servicios públicos», replican en la Generalitat. El Govern catalán comunicó el pasado viernes a las farmacias que no estaba en disposición de pagarles 300 millones de eurosadeudados.
El conseller de Finanzas, Andreu Mas-Colell, sostiene que el apoyo del FLA es necesario, dado el desequilibrio que existe en el reparto del déficit que, en su opinión, está hecho para que la Administración central aumente el gasto y las comunidades se vean obligadas a recortarlo. «El FLA no es un ninguna dádiva», subrayan a este diario en la Generalitat. Mas-Colell maneja un gráfico (ver reproducción adjunta) basado en datos de la Intervención General del Estado(Igae). En él se señala que, mientras la Administración central ha aumentado el gasto en un 2,4% en el periodo de crisis 2010-2014, las comunidades lo han recortado en un 14% y las corporaciones locales, en un 21%.
Montoro sostiene que no hay tal desequilibrio en el esfuerzo y que el recorte del gasto es, en todo caso, positivo para las propias comunidades autónomas, porque sin él no pueden financiarse en los mercados internacionales. De hecho, por eso existe el FLA, que concede sus préstamos a interés cero, según suele subrayar el ministro.
Por otra parte, la tensión política entre la Generalitat y el Gobierno central puede estar influyendo en el retraso en la decisión de reparto final del FLA. El secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, anunció hace escasas semanas que la distribución sería aprobada por la Comisión Delegada de Asuntos Económicos, «seguramente en octubre», pero no sólo no ha sucedido, sino que ahora «no hay fecha», según las fuentes consultadas en el Ministerio de Hacienda. Montoro se encuentra entre dos fuegos, porque retrasar la decisión perjudica a muchas otras comunidades autónomas que también aspiran a copar parte del reparto final para arreglar su tesorería. Y además, en plena campaña electoral para las generales del 20-D.