Parece que se está formando, en esta España de nuestras entretelas, una verdadera conspiración en contra del nuevo gobierno del señor Rajoy. Se está creando una especie de entente cordiale entre las fuerzas nacionalistas y de izquierdas, que no es, evidentemente, la del Reino Unido y Francia del 8 de Abril del año 2004, pero que sí tiene una gran semejanza, por lo torticera, antipatriótica, oportunista y desleal para el país, con el famoso Pacto del Tinell que, socialistas y nacionalistas, firmaron a principios del 2004, para impedir al PP ejercer de oposición y mantenerlo alejado de la arena política, impidiéndole actuar de contrapeso de las políticas socialistas, aquellas que han sido los cimientos del derrumbe de España.
El PSOE parece que quiere dar un paso al frente para endurecer más, si cabe, el tipo de oposición al Gobierno del señor Rajoy. Por eso hemos visto como, lo que se suponía que debería ser una batalla parlamentaria, todo lo dura que se quisiera, pero respetando las reglas de la democracia y reconociendo que, los españoles, le otorgamos al PP una mayoría absoluta a través de las urnas, para que pudiera hacer lo que ahora, en sólo 4 meses, intenta poner en práctica, a pesar de la herencia recibida, a pesar de las circunstancias desfavorables de tener que bregar con una UE llena de suspicacias, desconfianza y temores derivados de los errores del gobierno anterior y de las mentiras que intentó endosarles el señor Zapatero. Rajoy intenta superar las zancadillas que el partido socialista, en un ejercicio de deslealtad y traición a los intereses del país, se empeña en ponerle para conseguir, por el sistema de provocar, por los métodos menos ortodoxos, incluso ilegales, su desgaste y el de su gobierno, con la perversa intención de obligarle a dimitir y a anticipar las elecciones, para conseguir hacerse de nuevo con el poder que parece, por su avieso comportamiento, que no se resignan a perder.
Si la señora Valenciano ha elevado el tono de su discurso, si se ha salido de lo que debiera ser su función como parlamentaria consistente en discutir y argumentar, en los bancos del Parlamento lo que crean que el Gobierno está haciendo mal; como se saben sin argumentos consistentes; como, en el fondo, se reconocen causantes de la crisis (al menos en un 80%), y deben reconocer que, en todos los años de su gobierno, no han sido capaces de llevar a cabo ni un 1% de las reformas que está llevando a efecto el PP en sólo cuatro meses; han decidido acudir a aquello en lo que son maestras las izquierdas, el engaño, la descalificación y la propaganda, para movilizar a las masas y sacarlas a la calle. La señora Valenciano, la segunda en el partido del señor Rubalcaba, ha convocado a los ciudadanos a que se manifiesten en las calles en contra de las reformas llevadas a cabo por el Ejecutivo; un sistema que los socialistas ya practicaron, con éxito, el mes de marzo del 2004, cuando apelaron al atentado del 11M para utilizarlo para minar la credibilidad del PP, que figuraba como favorito en todas las encuestas. El día antes de los comicios, salieron a las calles para atacar las delegaciones del PP, en uno de los actos ilegales que quedaron impunes, sin que la Junta Electoral tomara las medidas que correspondía adoptar: suspender los comicios hasta que se hubieran depurado responsabilidades.
Vean como la desvergüenza, la completa desfachatez y la falta de decencia del líder del PSOE, señor Rubalcaba, llega al summum de la torpeza, cuando la UE acaba de darle la razón al PP sobre la cuantía del déficit del año 2012, que la señora Salgado había asegurado que era de un 6% y todos los miembros del PSOE la apoyaron sosteniendo que, el partido del gobierno, lo estaba hinchando artificialmente cuando afirmaron que era del 8'5%. Pues bien, después de que quedaran las cosas claras y que se haya demostrado en la UE que ha sido un intento del PSOE de esconder nada menos que 27.000 millones de euros del déficit real del año pasado; nos aparece este Rasputín de la política, este embustero compulsivo y experto en tergiversar la verdad, para hacer aparecer que los responsables de que todo vaya mal son los del PP –a pesar de que, el mismo, ha estado en el gobierno durante las dos nefastas legislaturas del señor Rodríguez Zapatero contribuyendo no poco a la ruina del país – para querer enmendar la realidad con el cuento de que, el señor ZP, ya le había dado a Rajoy "los datos reales" que, según este intrigante, el líder del PP se los habría reservado para darlos a conocer después, cuando le conviniera. Entonces, señor Rubalcaba, ¿la señora Elena Salgado que estuvo empecinada en decir que el déficit era del 6%, incluso cuando ya había abandonado el cargo, por qué no rectificó si, el señor ZP, ya había destapado el pastel? Y ¿por qué, el PSOE, ha estado sosteniendo (hasta el desmentido de la UE) que era el PP el que engañaba a Bruselas al afirmar que existía un desfase de dos puntos y medio entre la realidad y el dato facilitado por el PSOE? No cuadran los datos.
Pero es que, el desmadre ha comenzado con el acuerdo entre el PSOE e IU para el parlamento andaluz; con propuestas de creación de un Banco Público, con entregas de 61 millones de euros no se sabe para que tipo de subvenciones, con proyectos de establecer unos nuevos PER etc; .ya da la medida de hasta donde están dispuestas las izquierdas (PSOE y IU) a coaligarse en su enfrentamiento con el Estado. Es obvio que el señor Rubalcaba está preparado para recurrir a los métodos que ya está acostumbrado a utilizar y de los que ha dado muestras claras en las negociaciones secretas con ETA, mientras afirmaba que sería duro con ella; en la liberación de presos etarras, utilizando todos los trucos que el sistema penitenciario le permitía, mientras juraba y perjuraba que no pararía hasta que la banda se disolviera y entregara las armas. Hoy se le escuchaba despotricar contra el concepto de "turismo sanitario" que calificaba de "xenófobo, cruel e ineficaz"; lo que se calla es el porqué, el señor Caldera, de su partido, dejó que los inmigrantes invadieran la península y luego, sin discriminación alguna, decidió regularizarlos a todos.
De aquellos polvos estos lodos, señor Rubalcaba, y usted debiera ser el primero en entonar el mea culpa por permitir aquel error garrafal que tan malas consecuencias nos ha traído a España. ¿Por qué, el resto de la UE se quejó y ahora Alemania y Francia han decidido dejar en suspenso el tratado de Schengen para evitar la entrada de inmigrantes? O ¿es que el señor Rubalcaba quiere que se de servicios a inmigrantes irregulares que no pagan impuestos en España, cuando a los españoles se nos exige su pago? Pero parece que el líder del PSOE no toma en consideración el mal efecto y la desconfianza que produce, en Bruselas y a los inversores ver como, en momentos en los que debería existir una tregua política para actuar a la una para salvar a España, resulta que, hasta los partidos que, en teoría, debieran actuar democráticamente, llevando sus quejas a través de la actuación parlamentaria; parece que han decidido acudir a métodos revolucionarios, de estilo jacobino, para incendiar las calles con manifestaciones. Pero no les extrañe, porque aquellos Sindicatos que tan inoperantes se mostraron en tiempos de Zapatero ya están calentando motores para intentar poner el día 29 de Abril, en una situación incómoda al Gobierno con el apoyo de IU y el PSOE.
La señora Aguirre ha dado la solución: fuera subvenciones a sindicatos y patronal. Que se las arreglen con las cuotas de sus afiliados. Así sabrán lo que vale un clavo. O esta es, señores, mi impresión sobre la estrategia destructiva del PSOE y sus adláteres.
Miguel Massanet Bosch