"Hay cosas que no tienen remedio y son las más" M.J. de Larra
Los perros que salen malparados de una pelea, cuando son vencidos, huyen a un puesto apartado para lamerse las heridas, si son varios los que se juntan es posible que no se sientan tan tristes y hasta llegue un momento en que se lleguen a creer que en lugar de perder, han vencido. Los socialistas en este constante "ricercare" del lugar en el que colocar a su partido, para echar nuevas raíces, rechazado por los votantes de la derecha, el centro y por los de su emplazamiento político natural, el centro izquierda; no ven otro lugar donde poder asentarse si no es intentando pastorear en los pastos de la IU del señor Cayo Lara. Evidentemente el líder comunista no va a aceptar, por las buenas, que haya quien haga pastar su ganado en sus propiedades y, por ello, ya ha lanzado un aviso para navegantes al señor Rubalcaba y los suyos.
De hecho, esta Conferencia Política de los socialistas, en la que muchos de ellos habían puesto sus esperanzas de deshacerse de su actual presidente, el Rasputín del PSOE, señor Pérez Rubalcaba, no ha sido más que un nuevo paseo triunfal del veterano Rubalcaba que, como buen demagogo e intrigante, por el momento, no hay nadie de sus oponentes que se pueda atrever a toserle. No obstante, si los objetivos eran poner al señor Pere Navarro, del PSC, en el sitio que le correspondía, llamándolo al orden, condenando sus escarceos nacionalistas y sus evidentes actos de desobediencia a las consignas del PSOE; evidentemente, no se ha conseguido; antes bien, el que probablemente ha salido más satisfecho de este encuentro ha sido Pere Navarro al que, el resto de los asistentes se han sometido, incluso P.Rubalcaba le ha ofrecido una alianza (pactada, en petit comité, con Susana Diaz, de Andalucía y el propio Navarro). De reo ha salido vencedor por la puerta de honor. Hasta Rubalcaba, en el colmo de excitación, al verse reafirmado en su liderazgo, no se ha podido contener y ha gritado, con su voz de griposo, "Nos ha costado 30 años pronunciar la palabra federal".
Si, señores, por mucho que a algunos nos cueste aceptarlo, el nuevo partido socialista que, como ha vociferado don Alfredo al principio de su alocución, cuando ha dicho: "Hemos vuelto compañeros", parece que, desde su derrota de noviembre del 2011, no ha existido como partido y se ha limitado a vegetar rumiando sus errores, poniendo palos a las ruedas del partido gobernante y atizando la hoguera en la que ha pretendido quemar a la Iglesia católica, a las víctimas del terrorismo, al PP y a cualquiera que les recordara que fueron ellos los que dejaron a España como unos zorros, como verdaderos culpables de que se haya tenido que recortar en sanidad, educación, ayudas a los necesitados etc. para poder pagar a los que ellos dejaron sin trabajo gracias sus políticas de despilfarro, de subvenciones, de ayudas a paniaguados y de endeudamiento y déficit público, que nos han llevado a dos años en los que, el famoso bienestar, que ellos ahora, a tiro pasado, se ofrecen recuperar para quienes tengan la locura de votarlos; sin aceptar que los sufrimientos que han tenido que soportar los españoles, con motivo de los recortes obligados que ha hecho el Gobierno, se deben enteramente a su mal gobierno y a su incapacidad para afrontar la crisis.
¡Pelillos a la mar! Un señor Rubalcaba, convertido en un Júpiter tronante, en lugar de hablar de un nuevo plan para salvar a España, en vez de explicar con que medios va a contar para poder hacer lo que promete; en lugar de contarnos cómo va a compaginar todas las subvenciones y mejoras que propone con la necesidad de evitar que el déficit público se dispare y que nuestro endeudamiento (hoy en sus topes más altos cerca del 100% del PIB) llegue a límites insostenibles. No debemos olvidar que Europa nos vigila y no tolerará que volvamos a las andadas. Menos aspavientos mitineros, señor Pérez, menos críticas a la acción del actual gobierno y más autocrítica, algo que, por supuesto no ha sido tratado en la convención. Palabras y más palabras sin contenido alguno.
Lo que el señor Rubalcaba sabe, pero se lo calla, es que está acabado políticamente; que los votantes del PSOE ya no le quieren; que aquellos a los que envió al paro saben que no fue por culpa del PP, porque quienes permitieron que nuestra industria, nuestras medianas y pequeñas empresas, nuestros autónomos y toda nuestra economía se fuera al traste, fueron exclusivamente ellos, porque los que por inercia siguen cayendo, no se debe a otra causa que a sus errores, como fue el de dotar con un apoyo a la banca y las cajas de 50.000 millones de euros, supuestamente para que pudieran ayudar a las pequeñas y medianas empresas, que fueron destinados por los grandes banqueros a tapar sus propios agujeros contables (a causa de la devaluación de las viviendas por las que habían concedido ayudas e hipotecas); lo que impidió que se pudiera dar una inyección de liquidez a nuestras industrias y comercios que, con toda seguridad, hubieran paliado en parte lo que han sido las consecuencias de la recesión, entre ellas el paro.
Pero, de todos los pecados políticos que se han derivado de este mini congreso de los socialistas, el más grave, el más reprobable, el peor con mucho de los ataques a nuestra Constitución y a la unidad de nuestra nación; ha sido esta bajada colectiva de pantalones de todas las federaciones nacionales del PSOE, ante el desafío planteado por el PSC por medio de su líder el señor Pere Navarro. En realidad, ha sido él el que le ha permitido a Pérez Rubalcaba salvarse de una anticipación de las primarias, tal como le pedían los Gómez, de Madrid, García Page, de la comunidad manchega y la propia Carme Chacón que ha sido la única que no ha dicho ni pío, esperando, seguramente, que hubiera alguien que levantara la liebre para poder entrar en liza; nadie lo ha hecho y ella ha permanecido callada en espera de una mejor ocasión. Nadie debe darla por descartada.
Lo que sucede y debe tenerse muy en cuenta es que, la jugada de P.Rubalcaba lleva dinamita. En efecto, al retrasar las primarias hasta mediados o finales del año próximo no hace más que hacerle un flaco favor al posible aspirante, ya que le impide empezar a presentar sus propio programa electoral, buscarse los apoyos necesarios para presentarse y, cuando el vencedor sea elegido, se va a encontrar a las puertas de las nuevas legislativas, lo que le va a obligar a esforzarse mucho más para recuperar el tiempo que, con toda seguridad, le van a llevar de ventaja el resto de optantes a la presidencia del Gobierno del resto de partidos. Claro que, conociendo como se las gasta don Alfredo, uno podría pensar que esto es, precisamente, lo que se propone nuestro Rasputín, para que, una vez más, los suyos se decidan por contar con él como candidato.
Lo peor el apoyo indirecto al tema independentista, al aceptar como premisa que, en España, se puede hablar de un estado federal algo que, por supuesto, no contempla nuestra Carta Magna. Es evidente que ni CIU ni ERC van a admitir, como sustitutivo de su reclamación de autogestión o independencia, un sucedáneo de su actual autonomía que, en ningún caso, podría suponer la posibilidad de constituirse en una nación independiente del resto de España. Por otra parte, dudo mucho que al resto de autonomías, exceptuando los vascos, gallegos y canarios, les interesara asumir las responsabilidades de autofinanciarse con sus propios medios cuando, tal y como se encuentran en la actualidad, la mayoría de ellas deben acudir para financiarse a la ayuda del Estado. O así es, señores, como valoro lo que ha sido este encuentro del PSOE varado a la izquierda y soñando con imposibles.
Miguel Massanet Bosch